Sin ninguna duda, tras una experiencia asociativa previa que no prosperó, en la que aprendimos a decir 'no' a la manipulación y a la intransigencia; en 2008 creamos ASOCYL y hoy seguimos convencidos de haber acertado en esta trayectoria solidaria de asistencia integral hacia la sordoceguera; con mayor intensidad y dedicación, con mucha más independencia, con enorme sentido común y, por supuesto, con ese estilo propio que marca la diferencia y nos hace auténticos líderes en el sector.
Queda aun mucho 2018 para celebrar esta primera década de sueños cumplidos. Continuamos creciendo, pero... mejor contigo!!