Siempre hablando del 'despegue' definitivo esquivando cualquier obstáculo, soñando con el acierto en cada decisión, con lanzarnos a una nueva realidad en la que el equilibrio y el sentido común tomen las riendas... buscando este tipo de fórmulas inmediatas, apenas nos damos cuenta que nuestra situación de lucha constante hacia nuestros objetivos, aunque no es la más rápida, sí es la más efectiva.
Y aquí vamos a quedarnos, en esta dimensión que valoramos, en este horizonte despejado de la pura acción continuada en favor de la sordoceguera. La verdad, no nos ha ido nada mal... incluso mucho mejor de lo que esperábamos allá en 'nuestros orígenes'.
Vuelve junio y el DÍA INTERNACIONAL DE LAS PERSONAS SORDOCIEGAS, una perfecta excusa para añadir un plus de intensidad a este ritmo, frenético e imparable, que hace que nuestros servicios asistenciales, en cualquier área de atención, y las actividades especialmente adaptadas hacia el colectivo para el que trabajamos progresen y den resultados satisfactorios.