El clima está loco y desordenado, así que, en pleno febrero, en esta mañana luminosa de sábado, nos hemos dedicado a lo que más nos gusta: impulsar vida y a cuidar todo aquello que nos rodea. No dudamos ni un momento en participar de la plantación de árboles y arbustos en el bosque urbano Sta. Ana para que nuestra ciudad esté más bonita y para que todos nos sintamos infinitamente mejor.
Muy a última hora invitaron a ASOCYL a participar de esta experiencia y, casi sin tiempo para organizar nada, un pequeño grupo hemos decidido lanzarnos a la aventura de lo verde. Ojalá que pronto todos podamos compartir más experiencias como esta.
¡¡En el corazón de todos los inviernos vive una palpitante primavera!!